Creo que llegamos a entender lo que puede llegar a sentir el otro cuando lo experimentamos. Veo llorar a alguien que amo y pienso que el ser humano es egoísta. Es demasiado fácil señalar con el dedo, decir y acusar. ¿Cuándo vamos a parar con eso? Vivimos en una equivocación constante, todos. Hoy es a uno, pero mañana es a otro.